Piden la dimisión del Concejal Sr. Arroyo

En el Pleno celebrado el 28/12/07 el exconcejal de sanidad, Sr. Mayoral (CIU), pidio la dimisión del actual concejal Sr. Arroyo (PSC), por la situación que vive la sanidad en Polinyà.

El rifirrafe Mayoral-Arroyo no es nuevo. Viene de la anterior legislatura, cuando el actual responsable preparaba su escalada a las listas electorales del PSC y el concejal Mayoral llevaba la cartera de sanidad. Como información pública, hay que decir, que en aquel tiempo, próximo a la campaña electoral, el Sr. Arroyo sorprendentemente pidió la dimisión de Mayoral. Como recordatorio histórico, comentar que Sanidad es una cartera que durante el pacto PSC-CiU, ha estado dirigida primero por PSC y en las dos últimas legislaturas por CiU.

Ambos contendientes han gobernado y gobiernan la cartera en un momento dulce; en el periodo del Sr. Mayoral, por presiones de la Plataforma de la Sanidad pública, se consiguió el compromiso de un nuevo CAP y durante el periodo de mandato del Sr. Arroyo, será cuando se construya, en las condiciones ya informadas y publicadas. Los dos han disfrutado y disfrutarán de los beneficios del Pacte del Tinell; uno porque es cuando se publicó la construcción y otro porque seguramente será en este mandato cuando se inaugure.

Como siempre el trabajo realizado sin propaganda de los movimientos sociales y sus impulsores, quedará sólo en los hechos, los que han llevado a la población a que pueda disfrutar en breve de unas instalaciones o infraestructuras sanitarias, acorde a las necesidades de los usuarios. A fin de cuentas eso es lo que importa. Y así lo esperamos.

Ahora bien, ¿qué servicios tendremos?. Quiero recordar que junto a las instalaciones y su capacidad, son los servicios lo que determinan la calidad de la sanidad pública. Conseguir un estado saludable de la ciudadanía, es por lo que hay que pelear en adelante con las administraciones. De poco nos servirían las mejoras conseguidas en las instalaciones, si no se consiguen más y mejores servicios, que es lo que le importa finalmente a la población.

Por tanto, es en esa dirección y no otra, hacia donde hay que caminar y dejar que el tiempo ponga a cada cual en su lugar.